Poesía y educación

Poesía y educación

                                                                                            Un café nunca está lejos.  

                                                                                                            Juan Larrea

“¿Puede enseñarse el gusto por la poesía?”, preguntarán algunos. “El gusto por la poesía no se enseña; se aprende”. “O se contagia”, contestarán otros. “O se despierta, pues según ciertas teorías lingüísticas, todos somos poetas o, al menos, todos podemos serlo: todos podemos escribir versos de inigualable originalidad, de estremecedora belleza. El profesor y la escuela deben crear las condiciones necesarias para ese despertar del niño o del adolescente a la poesía y para que en el aula emerjan versos individuales o colectivos con los que nadie ha soñado jamás”, dirá el de más allá. Opiniones.

En una investigación llevada a cabo por un grupo de profesores de la Universidad de Barcelona sobre la enseñanza de la poesía[1], se observa que la mayoría de centros educativos de la ciudad (el 95% de los que contestaron la encuesta) realiza actividades relacionadas con la poesía: concursos literarios, asistencia a recitales y espectáculos poéticos, encuentros con poetas, lecturas de poemas, créditos variables, etc. En el estudio se constata, entre otros datos reveladores, que en un 25% de centros trabajan profesores que cultivan la poesía y que en un 86% de los centros se sabe de alumnos que escriben versos, acuciados por un impulso expresivo. Sin embargo, a pesar de estos porcentajes, los profesores coinciden en que no se organizan suficientes actividades relacionadas con la poesía en los centros (86%). Opiniones.

Sobre los valores educativos —estéticos, morales y emocionales— que el acercamiento a la poesía comporta en el niño, nadie discute. Lo que se discute es cómo se crean las condiciones para conseguir una mayor eficacia en la didáctica de la poesía: qué métodos, qué recursos, qué trucos emplear para que el escolar se familiarice con la poesía, sobre todo en estos malos tiempos para la lírica en los que “la abundancia nos ha empobrecido” (Ovidio) y los poetas son, como quería San Pablo que fueran los primeros cristianos, “los que nada tienen y todo lo poseen”. Opiniones sobre metodología y técnicas hay muchas, pero quizá las más valiosas sean las que vienen avaladas por la práctica. Si la coherencia de nuestras palabras la confirman o la niegan nuestros hechos, la eficacia de las teorías didácticas se demuestra al desarrollarlas el profesor en el día a día de la clase.

Por otra parte, cuando se consulta la bibliografía sobre cómo trabajar la poesía en el aula, se echa en falta una reflexión ponderada de los profesores de Lengua sobre su práctica docente. No escasean los ensayos escritos desde una perspectiva gnoseológica o psicopedagógica —algunos ciertamente muy luminosos y necesarios[2]—, pero sí los testimonios de quienes, humildemente, sin mixtificaciones, asumiendo sus propios límites, hablan de cómo tratan de ensanchar el horizonte personal de sus alumnos a través del conocimiento y la vivencia de los versos.

Por eso creemos necesaria ésta y similares convocatorias, y quisiéramos que sirvieran estas líneas de llamada a todos aquellos, profesores de Lengua de primaria y secundaria, poetas y aficionados, que tengan interés en encontrarse para hablar de su experiencia. Y que aparecieran en las publicaciones especializadas muchos más testimonios que, a modo de diario o mediante algún tipo de narración, recogieran los avances, vacilaciones y retrocesos, la decepción, la duda y el entusiasmo que a veces asaltan a quienes defienden el jardín de las palabras en la enseñanza.

Si trabajamos la poesía en el aula, debemos saber que no estamos solos, pero que si lo estuviéramos, la necesidad de la poesía para la educación sería igualmente imperiosa.

Esta jornada dedicada a reflexionar sobre el trabajo con la poesía en el aula se celebrará en el IES Puig Castellar de Santa Coloma de Gramenet la tarde del día 12 de noviembre de 2003, miércoles, con el siguiente horario:

 Programa

• De 16.30 a 17.30 h.: hablan los poetas. “Importancia de la poesía en la educación de la sensibilidad.”

• De 17.45 a 19 h.: hablan los profesores. “Experiencias pedagógicas: cómo trabajar la poesía en el aula”.

• De 19.15 a 20.30 h. mesa redonda seguida de coloquio. “Presente y porvenir de la poesía en la escuela.”