Extravagario I
Presentación
Se recogen en este cuaderno diferentes composiciones y ejercicios, escritos como deberes escolares por los alumnos de 1º de ESO (grupo A) para la asignatura de Lengua Española. Se han reunido en siete apartados.
En “Las letras del alfabeto”, hemos seguido el ejemplo de los “Abecedarios amorosos”, que fueron tan comunes en la literatura española clásica (Cervantes en El curioso impertinente y Lope de Vega en Peribáñez dejaron ingeniosas muestras de este juego). En nuestro caso, el ejercicio consistía en decir a qué se parecía cada letra del alfabeto.
En el segundo apartado y en el último se han recogido, respectivamente, variaciones de versos de Gloria Fuertes y de Espronceda, serias unas y jocosas otras. Seguro que desde el cielo de los poetas estos dos autores perdonarán nuestro atrevimiento y que no les faltarán sonrisas ni razones para su benevolencia.
La tercera sección está formada por caligramas, o por composiciones que los remeda. Los chicos saben que las palabras se pueden disponer sobre el papel en forma de líneas, unas debajo de otras, pero también en forma de sol, de flor, de estrella... Y es un caligrama: un dibujo hecho con palabras, a ser posible, poéticas.
Los refranes no son muy usuales ahora en la ciudad, aunque muchos de ellos perduren por su ingenio, su sonoridad o por el conocimiento que comunican. Manipulando algunos de los más conocidos, los alumnos han inventado un nuevo refranero, y la verdad es que algunos de sus ejemplos merecerían trascender estas páginas: compruébelo el amable lector por sí mismo en la cuarta sección de este librito.
¿Qué es un poema dadaísta?, preguntó algún alumno cuando el profesor propuso que recortaran, mezclaran y pegaran palabras de un artículo periodístico. La solución la dio en su momento (1916) un poeta rumano, Tristan Tzara, y nosotros nos hemos limitado a transcribirla como epígrafe en el apartado quinto.
La palabra más rara de todas las que figuran aquí sirve para titular el penúltimo apartado, el de los “Anaglifos”. La verdad es que no se sabe quién inventó la palabra, pero sí qué poetas amigos de García Lorca aceptaron la propuesta de escribir cuatro versos muy breves —los dos primeros iguales— que acababan de una manera algo chocante, y a eso, por divertirse, lo llamaron anaglifo, tal vez porque la palabra sonaba a jeroglífico.
En fin, después de tantos ejercicios verbales algo extravagantes, ¿por qué no pedirle prestada la palabra a Pablo Neruda y llamar a nuestro librito Extravagario?
Que usted, gentil lector, disfrute leyendo estas páginas como los alumnos disfrutaron escribiéndolas. El curso ha terminado. Muchas gracias por su atención.
Santa Coloma, 22 de junio de 2002.
Francisco Gallardo Díaz
1. LAS LETRAS DEL ALFABETO
I
La A me recuerda una montaña nevada.
La B me recuerda el trasero de Shin Chan.
La C me recuerda una media luna.
La D me recuerda un montón de arena.
La E me recuerda los dientes de un tridente.
La F me recuerda un pájaro con el pico abierto.
La G me recuerda la lengua de un camaleón en el momento en que se enrosca.
La H me recuerda un puente gigante.
La I me recuerda un puente colgante visto desde arriba.
La J me recuerda un garfio.
La K me recuerda una flecha clavada en una diana.
La L me recuerda una silla sin patas.
La M me recuerda la boca de un pez.
La N me recuerda una Z tumbada.
La Ñ me recuerda una N con un pájaro encima.
La O me recuerda una pelota.
La P me recuerda un hacha.
La Q me recuerda un taburete.
La R me recuerda una carretilla.
La S me recuerda una cuerda.
La T me recuerda un parasol de playa.
La U me recuerda un vaso.
La V me recuerda un colmillo.
La W me recuerda dos montañas.
La X me recuerda un reloj de arena.
La Z me recuerda una N tumbada.
Francisco Cruz Illán
II
La A me recuerda una montaña nevada.
La B me recuerda dos pechos.
La C me recuerda un pendiente.
La D me recuerda la cabeza de un misil.
La E me recuerda un puente de pie.
La F me recuerda unas estanterías.
La G me recuerda un carrito.
La H me recuerda una silla.
La I me recuerda a una persona de pie.
La J me recuerda una nariz.
La K me recuerda un parasol caído.
La L me recuerda la esquina de una calle.
La M me recuerda una silla vista desde arriba.
La N me recuerda una Z caída.
La Ñ me recuerda una N con una nube.
La O me recuerda una pelota.
La P me recuerda una d puesta para abajo.
La Q me recuerda una pandereta.
La R me recuerda una cuesta de carretera.
La S me recuerda las curvas de una carretera.
La T me recuerda una antena de televisión.
La U me recuerda un cesto sin asas.
La V me recuerda el pico de una montaña visto al revés.
La W me recuerda una cadena montañosa.
La Y me re recuerda una espada.
La Z me recuerda la señal de tráfico que anuncia curvas peligrosas.
Joan Díaz Solana
III
La A me recuerda el pico de una montaña.
La B me recuerda la oreja de un niño.
La C me recuerda una luna menguante.
La D me recuerda la boca de un niño contento.
La E me recuerda las puntas del tridente del diablo.
La F me recuerda un trampolín puesto de pie.
La G me recuerda al número 6.
La H me recuerda las porterías del rugby.
La I me recuerda las piernas de Fran D.
La J me recuerda a un gancho.
La K me recuerda un pájaro posándose en el tronco de un árbol.
La L me recuerda al número 7 puesto para abajo.
La M me recuerda un vestido.
La N me recuerda una Z caída.
La Ñ me recuerda un bigote encima de una N.
La O me recuerda un dónut. O un ojo. O una pelota. O una barriga. O un huevo. O el número 0.
La P me recuerda un mazo.
La Q me recuerda un polo.
La R me recuerda un lazo.
La S me recuerda una serpiente.
La T me recuerda una pierna con el pie para arriba.
La V me recuerda un signo matemático puesto para abajo.
La X me recuerda el signo de multiplicar.
La Y me recuerda la rama de un árbol.
La Z me recuerda un muelle.
Virginia Zaldívar Puigmal
IV
La A me recuerda la Torre Eiffel.
La B me recuerda el trasero de Chin Chan.
La C me recuerda media luna.
La E me recuerda un peine.
La F me recuerda una llave.
La G me recuerda la trompa de un elefante enrollada.
La H me recuerda el escalón de una escalera.
La I me recuerda una pesa.
La J me recuerda el respaldo de una silla.
La K me recuerda un columpio.
La L me recuerda un ángulo de 90º.
La M me recuerda una corona.
La N me recuerda una M incompleta.
La Ñ me recuerda un cuello de camisa con una pajarita en lugar de una corbata.
La O me recuerda un aro.
La P me recuerda una nota musical.
La Q me recuerda una cereza.
La R me recuerda una tijera.
La S me recuerda una serpiente.
La T me recuerda un tornillo.
La U me recuerda una sonrisa.
La V me recuerda el pico de un pájaro.
La W me recuerda una cadena de montañas.
La X me recuerda las aspas de un molino.
La Y me recuerda unos auriculares.
La Z me recuerda a un cisne.
Jennifer Calvillo López
VI
La A me recuerda un cuerno de unicornio.
La B me recuerda a una mujer embarazada.
La C me recuerda una media luna.
La D me recuerda una barriga gorda.
La e me recuerda un ojo.
La f me recuerda una jirafa.
La G me recuerda un 6.
La H me recuerda un puente.
La I me recuerda una H tumbada.
La J me recuerda un imperdible.
La K me recuerda los cuernos de un toro.
La L me recuerda el ángulo recto.
La M me recuerda una montaña.
La N me recuerda una Z caída.
La Ñ me recuerda un relámpago.
La O me recuerda un dónut.
La P me recuerda un chupa-chups.
La Q me recuerda el rabo de un gato.
La R me recuerda una persona bailando.
La S me recuerda un látigo.
La T me recuerda una cruz.
La U me recuerda una uña.
La V me recuerda el colmillo de un vampiro.
La W me recuerda a la M vista del revés.
La X me recuerda el signo de multiplicar.
La Y me recuerda un tirachinas.
La Z me recuerda una N caída.
Natàlia Fernández Hervás
VII
La A me recuerda una montaña nevada.
La B me recuerda un 8 partido por la mitad.
La C me recuerda un cruasán.
La D me recuerda la barriga de una embarazada.
La E me recuerda una B incompleta.
La F me recuerda la mitad de una A.
La G me recuerda un nueve 9 al revés.
La H me recuerda los listones para los saltos de altura.
La I me recuerda un palo.
La J me recuerda una nariz.
La K me recuerda una R incompleta.
La L me recuerda un tobogán.
La M me recuerda una W del revés.
La N me recuerda una M incompleta.
La Ñ me recuerda una cabeza con un rizo.
La O me recuerda un agujero.
La P me recuerda una pared con un bulto.
La Q me recuerda una moneda pegada a un palito.
La R me recuerda a un chico haciendo gimnasia.
La S me recuerda un rizo del pelo.
La T me recuerda un poste de la luz.
La U me recuerda una O incompleta.
La V me recuerda una sonrisa.
La W me recuerda la M al revés.
La Y me recuerda un tirachinas.
La X me recuerda una cruz.
La Z me recuerda un gusano.
Clàudia Comella Díaz
VII
La A me recuerda la cabeza de un toro con los cuernos hacia abajo.
La B me recuerda a una mujer embarazada.
La C me recuerda la media luna.
La D me recuerda a un barrigón.
La E me recuerda una oreja.
La F me recuerda una llave.
La G me recuerda una silla.
La H me recuerda una muleta.
La I me recuerda el palo de una escoba.
La J me recuerda un palo de golf.
La K me recuerda unas antenas de televisión puestas de lado.
La L me recuerda un palo de hockey.
La M me recuerda un tenedor.
La N me recuerda las curvas de la carretera.
La Ñ me recuerda una montaña con una nube
La O me recuerda una pelota.
La P me recuerda una bandera.
La Q me recuerda la luna llena.
La R me recuerda la cabeza de un caballo.
La S me recuerda una serpiente.
La T me recuerda un taburete con una sola pata.
La U me recuerda un lavabo.
La V me recuerda un escote.
La W me recuerda dos pechos.
La X me recuerda el punto de cruz.
La Y me recuerda un tirachinas.
La Z me recuerda un pato.
Olga Montoya Cinca
2. VARIACIONES SOBRE TRES VERSOS DE GLORIA FUERTES
Estrellas,
se me olvidó reír,
¿cómo se ríe?
Gloria Fuertes
PRIMERA VARIACIÓN
Ojos,
se me olvidó mirar,
¿cómo se mira?
Sonrisa,
se me olvidó reír,
¿cómo se ríe?
Amigos,
se me olvidó jugar,
¿cómo se juega?
Abuela,
se me olvidó querer,
¿cómo se quiere?
Alba Calvo Lallave
SEGUNDA VARIACIÓN
Luna,
se me olvidó dormir,
¿cómo se duerme?
Estrellas,
se me olvidó soñar,
¿cómo se sueña?
Arcoiris,
se me olvidó pintar,
¿cómo se pinta?
¡Mamá!,
se me olvidó la maleta,
¿cómo encontrarla?
Estela Perales Sáez
TERCERA VARIACIÓN
Aire,
se me olvidó respirar,
¿cómo se respira?
Sabios,
se me olvidó saber,
¿cómo saber que sé algo?
Caminos,
se me olvidó viajar,
¿cómo se viaja?
Gente,
se me olvidó vivir,
¿cómo se vive una vida feliz?
Francisco Cruz Illán
CUARTA VARIACIÓN
Niños,
se me olvidó jugar,
¿cómo se juega?
Hombres,
se me olvidó amar,
¿cómo se ama?
Música,
se me olvidó cantar,
¿cómo se canta?
Dios,
se me olvidó hablar,
¿cómo se habla?
Clàudia Comella Díaz
3. CALIGRAMAS
[Los Caligramas no se han publicado de momento en esta página.]
4. NUEVO REFRANERO
I
- Cuando el sol amanece, todo el mundo enriquece.
- No hay nada mejor, que un buen mejillón.
- Más vale chico en mano, que ciento llorando.
- Si quieres juzgar, antes conócete.
- Si te haces el rico, te quedarás solico.
Natalia Fernández Hervás
II
- Perro ladrador, mal cazador.
- Dime con quién andas, que te iré a buscar.
- A quien madruga y conduce, tortazo que se pega.
- Más vale pájaro en mano que liendres en la cabeza.
María Santiago Visiedo
III
- Al mal tiempo, no te rías del vecino.
- Arrieros somos: te diré quién eres.
- Viene de camino: no te rías del vecino.
- ¡Buena cara!, mira con quién andas.
Jennifer Calvillo López
IV
- A los ladrones, pocas razones.
- Si mientes, después lo sientes.
- Con el ciego, mucho miedo.
- En las Ramblas, muchas miradas.
Alba Calvo Lallave
V
- Por decir las verdades, nadie es profeta.
- Quien a hierro mata, a ciego satisface.
- Al buen amigo, Dios le ayuda.
- No hay peor ciego en su tierra que el que ve demasiado.
- No hay peor ciego que el que no tiene amigos.
Samuel López Perales
VI
- Quien razones da, buenos amores tiene.
- Las cosas del parabrisas van deprisa.
- Para aprender hay que leer.
- El buen amigo no ha desaparecido.
Clàudia Comella Díaz
VII
- A quien a hierro mata, ni le des tu pan ni le des tu vino.
- No hay peor ciego que el que va despacio.
- A quien quiera ser doctor, no hay idiota que le enseñe.
Francisco Cruz Illán
5. POEMAS DADAÍSTAS
PARA HACER UN POEMA DADAÍSTA
Coja un periódico.
Coja unas tijeras.
Escoja en el periódico un artículo de la longitud que cuenta darle a su poema.
Recorte el artículo.
Recorte en seguida con cuidado cada una de las palabras que forman el artículo y métalas en una bolsa.
Agítela suavemente.
Ahora saque cada recorte uno tras otro.
Copie concienzudamente las palabras en el orden en que hayan salido de la bolsa.
El poema se parecerá a usted.
Y es usted un escritor infinitamente original y de una sensibilidad hechizante, aunque incomprendida por el vulgo.
Tristan Tzara
[Los poemas dadaístas no aparecen de momento en esta página.]
6. ANAGLIFOS
El búho,
El búho,
La gallina
Y el Pantocrátor.
José Moreno Villa
La tonta,
La tonta,
La gallina
Y debajo hay algo.
Federico García Lorca
I
La rata,
La rata,
El gato,
¿Dónde he puesto mi zapato?
Francisco Cruz Illán
II
El hombre,
El hombre,
El niño
Y allá se las compongan.
Olga Montoya Cinca
III
El bicho,
El bicho,
La ola
Y algo se me ha perdido.
Virginia Zaldívar Puigmal
IV
La niña,
La niña,
El perro
¿…Dónde estará la gallina?
Olga Montoya Cinca
V
El pájaro,
El pájaro,
El pájaro canta
Y la radio se ha estropeado.
Natàlia Fernández Hervás
VI
El pez,
El pez,
El lápiz
Y una mujer que reparte zumos.
Francisco Cruz Illán
VII
El gusano,
El gusano,
La serpiente
Y levanta la cabeza al cielo.
Jennifer Calvillo López
VIII
La mona,
La mona,
El gorila
Y los dos rodando por el suelo.
Jennifer Calvillo López
IX
El amor,
El amor,
La pobreza,
¿Quién pinta debajo de la mesa?
Estela Perales Sáez
X
El pez
El pez,
La piraña,
¿por qué huyes?
Samuel López Perales
XI
Fátima,
Fátima,
¡cuidado por el parque,
que te caes!
María Santiago Visiedo
XII
El pato,
El pato,
La consola,
¡a ver si miras por donde pisas!
María Santiago Visiedo
7. VARIACIONES LÚDICAS SOBRE LA “CANCIÓN DEL PIRATA”
PRIMERA VARIACIÓN
Con diez caracoles por banda,
Viento en cara a toda pasta,
No corta corcho sino tabla
Un juguete bergantín:
Coche romano que llaman
Por su bocina el Temido,
En todo peaje conocido
Del uno al otro país…
Alan García García
SEGUNDA VARIACIÓN
Con diez espadas por banda,
Arco en mano a toda flecha,
No corta pan sino arrasa
Un ejército mongol:
Tropa que llaman
Por su bravura Temida,
En todo lugar conocida
Del uno al otro confín.
La sangre en el campo rïela;
En la hierba gime el viento
Y alza en blando movimiento
Flechas de plata y azul:
Y va el capitán mongol
Luchando alegre en el campo:
“Avanza, ejército mío,
que ni tropa ni legión
tu rumbo a torcer detiene
ni a sujetar tu valor.
Veinte luchas
Hemos hecho
A despecho
Del inglés
Y han rendido
Sus espadas
Cien naciones
A mis pies.
Que es mi arco mi tesoro,
Que es mi Dios la libertad,
Mi ley la fuerza y la espada,
Mi única opción: luchar.”
Francisco Cruz Illán
TERCERA VARIACIÓN
(LA CANCIÓN DEL PIJAMA)
Con diez marrones por banda,
Lino en ropa y todo a mano,
No cuesta la mar sino lana,
Mi pijama baratín.
Es el pijama que llaman
Por su textura el Suavito,
En todo bazar conocido
Del uno al otro confín.
La luna en el lino rïela,
Y en él acaricia el viento,
Se ondulan en blando movimiento
Osos y luna en azul.
“Que es mi ropa un pijama,
Que es mi dios el capital,
Mi ley vender mis pijamas,
Mi única patria, ganar.”
Virginia Zaldívar Puigmal
CUARTA VARIACIÓN
Con diez jamones por banda,
Viento en cara a todo gas,
No toca el suelo sino canta
Un velero chapucero:
Bajel gitano que llaman
Por su dulzura María,
En todo puerto alabado
por su popa y por sus velas.
El sol luce en el mar;
En la cara choca el viento,
Y cantan cursis cancioneros
Chicos de cuerpo cabal.
Y va él como un dios allá,
Gritando triste en el suelo.
Casa en un sitio, en el otro un palacio,
Y delante un reino: Marruecos.
“Navega, velero mío,
que nadie te lo impedirá,
ni mirará mis vaqueros
lo desgastados que están…”
Natàlia Fernández Hervás
QUINTA VARIACIÓN
Con diez camiones por banda,
Viento en popa a toda caña,
No corta el mar sino pasa,
Un velero chiquitín.
Bajel cantante que llaman,
Por su carisma el Cochino,
En todo bar conocido
Del uno al otro cojín.
La luna en el mar se mira;
En la lona muere el viento
Y lanza en blancos movimientos
Algas de agua y de sal.
Y ve el capitán cantante,
Cantando alegre en la proa:
Palma a un lado; Menorca al otro
Y allá en su frente, un peñón…
Estela Perales Sáez
SEXTA VARIACIÓN
Con diez pitones por banda,
Viento en popa a toda pasta,
No corta agua sino plata
Un velero pequeñín.
Bajel pirata que llaman
Por su bravura el Sufrido,
En todo mar conocido
Por uno y otro delfín.
La luna en el mar se baña;
En la lona sopla el viento
Y alza en duro sufrimiento
Olas de nata y tutú.
Y ve el capitán Piraña
Cantando alegre su sopa.
Roque a un lado; al otro, la Loca
Y allá en su frente, Gandul.
“Navega, velero, tío,
Sin sudor,
Que ni enemigo ni marido
Ni tormenta ni mudanza
Tu rumbo a torcer se alza
Ni a reprimir tu dolor.
Veinte fresas
Hemos deshecho
con tizones
y con pies
y han cantado
sus perdones
cien raciones
a mil diez.
Que es mi barco mi palacio;
Que es mi dios la Variedad,
Mi ley la fuerza y el Tiempo,
Mi única patria, un bar.”
Jennifer Calvillo López
Col·lecció Els Llibres del Puig.
1. Bestiario I (1º A).
2. Bestiario II (1º B).
3. Cacharrario I (1º A).
4. Cacharrario II (1º B).
5. Planetario I (1º A).
6. Planetario II (1º B).
7. Imaginario I (1º A).
8. Imaginario II (1º B).
9. Colomario I (1º A).
10. Colomario II (1º B).
11. Epistolario I (1º A)
12. Epistolario II (1º B)
13. Extravagario I (1º A)
14. Extravagario II (1º B)