La concentración desigual de alumnos inmigrantes
La concentración desigual de alumnos inmigrantes
La integración fracasa en la escuela
El Síndic denuncia que la Administración no actúa de forma efectiva para evitar guetos
MERCÈ BELTRAN - Barcelona - 16/05/2008, La Vanguardia
DIFERENCIAS POR CICLO En primaria hay más concentración de escolares inmigrantes que en secundaria
FALSA DUALIDAD Las diferencias se dan más entre los propios centros públicos que con los concertados
LIBERTAD Y EQUIDAD El Síndic advierte que se prima la elección de centro antes que el principio de equidad
Salvo excepciones, la integración fracasa S en la escuela. Prueba de ello es que para lograr una distribución equilibrada de alumnos extranjeros en las aulas, el 46% de los estudiantes de primaria y el 35% de secundaria tendrían que cambiar de centro. Así lo refleja el informe sobre La segregación escolar en Catalunya que el Síndic de Greuges, Rafael Ribó, entregó ayer al Parlament para su debate.
El Síndic denuncia que las administraciones infrautilizan el marco normativo y las herramientas políticas de las que disponen para realizar una distribución equitativa del alumnado. Por ello, además de proponer medidas, les impele a que se impliquen más en la lucha contra la segregación y que utilicen todos los mecanismos que tienen a su alcance para evitarla porque, de lo contrario, el riesgo de fractura social crece.
La advertencia que el Síndic hizo hace dos años sobre el riesgo de segregación escolar que corría Catalunya si no se actuaba con celeridad y valentía se ha cumplido. Sant Feliu de Llobregat, Lleida, Barcelona, Cerdanyola del Vallès, Sant Vicenç dels Horts y Esplugues de Llobregat encabezan la lista de los municipios con más segregación escolar en primaria. En secundaria, Barcelona encabeza la lista, seguida de Esplugues, Sant Feliu, Molins de Rei, Gavà, Sabadell y l´Hospitalet de Llobregat. El informe se basa en datos del curso 2006-2007.
Tras constatar que las políticas que se han implementado hasta ahora son insuficientes, al haber faltado una intervención atrevida y coordinada de las administraciones, el informe asevera que con "demasiada frecuencia" las administraciones, tanto Educació como Ayuntamientos, optan por "privilegiar la satisfacción de la demanda educativa de determinados grupos ante la elección de centro" antes que garantizar una política "que vele por la equidad en la distribución del alumnado socialmente más desfavorecido".
El derecho de las familias a elegir centro y la igualdad de oportunidades son principios constitucionales que, a juicio de Ribó, "son compatibles. La Administración debe velar por lograr el equilibrio entre ambos, pero constatamos que lo que se vulnera es la igualdad de oportunidades, y eso produce una fractura social que sufre el conjunto de la sociedad".
Aunque existe una clara relación entre segregación urbana y escolar, en muchos barrios o zonas la desigualdad escolar es más elevada que la urbana. Y esto ocurre porque en determinados centros se produce una concentración excesiva de población en situación de riesgo y, a la vez, las familias que pueden evitan llevar a sus hijos a las escuelas más "estigmatizadas".
Las escuelas de titularidad pública escolarizan el 85% de alumnos extranjeros. Pero el informe del Síndic rompe el tópico de que las desigualdades se producen entre escuela pública y concertada, ya que demuestra que hay un gran desequilibrio entre las públicas. "El fenómeno no responde a la dualidad del sistema", constata. A modo de ejemplo, en el barrio Fondo de Santa Coloma, donde el porcentaje de alumnado extranjero es del 34,5%, existen cinco centros públicos de primaria que concentran desde el 68.7% el que más, al 17,7% el que menos. El único concertado escolariza al 4,3% de inmigrantes. No obstante, en algunas zonas, las diferencias internas también se dan entre centros concertados.
El establecimiento de zonas educativas, apertura de nuevos centros y líneas, ampliaciones o reducciones de ratios allá donde se necesite, una mejora en la política de reserva de plazas para el alumnado con necesidades específicas, la corrección en la aplicación de la distribución de los alumnos que llegan durante el curso o las adscripciones entre centros de primaria y secundaria son algunas de las políticas que la Administración puede utilizar para combatir la segregación escolar y que, con frecuencia, no se utilizan. Y la prueba es que municipios con alto índice de inmigrantes, como Mataró, Vic y Olot, han demostrado que es posible lograr unos niveles de segregación bajos.