La educación en el Tercer Mundo
La educación del tercer mundo
Cuando he visto el vídeo, una gran tristeza se ha apoderado de mi corazón. Es una pena que haya niños que por haber nacido en otros países, no puedan ir a la escuela.
Que los niños sean tan pobres como para dormir en el suelo, para ir pidiendo dinero y para que los padres los abandonen me parece muy duro, pero que las personas de mediana edad hagan que los niños jueguen con armas o vayan a la guerra a cambio de comida, es aún peor. También me parece muy mal que los utilicen para transportar drogas de contrabando. Cada uno de ellos es un niño inocente que merece el amor y el calor de una madre.
Yo conozco algunos niños a los que les gustaría quedarse en casa, viendo la televisión estirados en el sofá, en lugar de aprovechar el tiempo para estudiar. Yo en cambio, pienso que todos mis amigos, y yo incluida, tenemos muchísima suerte de poder ir a la escuela, aprender, estudiar, y cada día ser un poco más libres.
Me gustaría ayudar a los niños que no pueden ir a la escuela, darles una oportunidad para aprender y ser felices. Para que no sufrieran tanto, porque sé que la vida puede ser muy dura. Creo que está muy bien que algunos hagan donativos a los pobres y que haya voluntarios que trabajen para ayudarles a mejorar un poco su calidad de vida. Yo deseo que esos niños algún día consigan un buen trabajo, un hogar y comida para cada día. Sé que es muy difícil pero si cada uno de nosotros colabora puede que algún día tengan una buena escolarización y puedan mejorar su vida.
Mireia Colàs (1º ESO)
Reflexió sobre el maltractament entre iguals
Com hi diu al text que hem llegit a classe, tothom té drets i deures que s’han de complir per millorar la vida de les persones. Encara que en aquest text digui que informar d’una agressió al professor no és “xivar-se”, els altres nois no pensen el mateix. Si un dia veus a algú agredint a algú altre el que has de fer és dir-ho al professor, però si l’agressor s’assabenta de qui l’ha delatat també t’agredirà a tu. Per això jo ho veig molt més complicat del que diu en el text. A les víctimes de les agressions els agrada anar amb els amics per sentir-se protegits i reconfortats però si una d’aquestes persones no té ni un amic, ho passa molt malament.
Per això jo crec que s’ha de donar suport a qui no té a ningú per recolzar-se, i així ajudar-la a resoldre el problema. No se de que serveixen els drets de les persones si contínuament no es respecten. M’agradaria que els agressors reflexionessin un moment i que pensessin perquè ho fan. Així potser es podria arribar a un acord per fer-li veure al agressor el que se sent.
Mireia Colàs Ortiz
(1r d'ESO)
[Aquests comentaris han estat publicats al número 34 de la revista Sota el cel Puig, desembre de 2010.]